Recientemente presenté una ponencia en la facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Madrid sobre la "controvertida composición y renovación" de los tribunales que componen el vértice judicial. Esto es, el Tribunal Supremo (TS), el Tribunal Constitucional (TC), el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). El trabajo será publicado próximamente en el anuario de dicha facultad. Para realizarlo examiné las páginas web de los altos tribunales con el fin de establecer algunos elementos básicos respecto a su composición (revisamos las páginas en enero de 2018).Ese examen puso de manifiesto unos datos que conviene difundir más allá de los foros puramente académicos. Es posible que algunos sean incorrectos, puesto que están extraídos directamente de dichas páginas y en algún supuesto eran incompletas. Pero no parece que los errores que se hayan podido producir cambien las líneas generales. Me parecen de interés sobre todo los datos referidos a la distribución de género de esos cuatro tribunales y a la procedencia de los magistrados, entendiendo por ésta el último lugar en el que trabajaron antes de ser nombrados para su puesto. Creo que los datos hablan por sí solos, así que me limito a exponerlos.Comencemos por género. Los datos son los siguientes:Respecto a la presencia femenina en las diferentes salas del Supremo, debe destacarse su poca representación en las salas civil y penal (1ª y 2ª).Resulta importante no sólo destacar el porcentaje de mujeres en los altos tribunales, sino también si ocupan puestos de dirección.Es relevante que nunca una mujer ha presidido el TS, el TEDH o el TJUE. En el caso del TC, por el contrario, debe subrayarse que de las seis mujeres que han sido magistradas desde su puesta en marcha, una ha sido presidenta del órgano y cuatro vicepresidentas. La única que no ha ocupado todavía un cargo de dirección es la nombrada más recientemente, que lleva sólo un año en el puesto.Respecto a dónde se encontraban (último puesto de trabajo) los magistrados de los altos tribunales antes de ser nombrados, recogemos sólo los datos referidos a los tribunales españoles. Los resultados son los siguientes:Esta tabla puede ser engañosa porque los magistrados del TC proceden de universidades y tribunales. Por ello, es lógico que en un alto número los provenientes de la carrera judicial ocuparan previamente un puesto en el Supremo, con sede en Madrid. Así que completemos el panorama recogiendo sólo a los profesores que accedieron al Constitucional (tabla 5) y su universidad de procedencia (tabla 6). Y veamos también donde se encontraba el último puesto desempeñado por los magistrados que accedieron al TS (tabla 7).Para cerrar el círculo, observemos el lugar del último destino de las mujeres que accedieron al puesto de magistradas.Conviene destacar que las mujeres nombradas magistradas del TC procedían de la universidad. En uno de los casos, se trata de una ex magistrada de la Sala Primera del TS, que antes de su ingreso en dicho tribunal había desarrollado una larga carrera académica en la universidad.Como decíamos al principio. Basta con leer las tablas.Sin comentarios.