De acuerdo con el informe
The Gender Gap in Pensions in the UE la brecha de género en las pensiones es del 34% en España. Esta brecha deriva de la organización social de los trabajos, incluyendo los de cuidados, y de las discriminaciones de género existentes en el mercado laboral, que provocan que las mujeres tengan una menor tasa de participación en el mercado de trabajo, estén empleadas menos horas y menos años a lo largo de la vida laboral y, por último, perciban salarios inferiores (24% de brecha salarial).
La configuración del sistema de pensiones español, centrado en la contributividad, en vez de aliviar las desigualdades de género en el mercado laboral las perpetúa, al penalizar gravemente a las personas que coticen menos años y por menos importe. Además, las últimas reformas del sistema han acentuado esta brecha de género en las pensiones al ampliar el período de cotización necesario para conseguir el total de la pensión de jubilación, aumentar el número mínimo de años cotizados o endurecer las reglas de cálculo de la pensión.
La brecha de género en el sistema de pensiones se refleja claramente en los siguientes gráficos, que representan el número de pensiones contributivas (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares) y no contributivas (PNC de invalidez y de jubilación) por tipo de pensión y sexo en 2014 y el importe medio de estas pensiones. Se observa que las mujeres son mayoría en aquellas pensiones de menor cuantía, como las de viudedad o las no contributivas, y además su pensión media suele ser mucho menor en los diferentes tipos de pensiones. Mientras que tres de cada cuatro hombres pensionistas cobraron pensiones de jubilación, cuyo importe promedio fue de 1.165, solo el 43% de las mujeres obtuvieron pensiones contributivas de jubilación con una cuantía media de 635,84 debido a los menores años cotizados y a sus inferiores salarios. Casi las mismas mujeres, el 40%, recibieron pensiones de viudedad de 712 euros de media. Y, por último, las mujeres representan el 67,63% de las pensiones no contributivas, las más bajas en cuantía, 366,90 mensuales en 2014, por debajo del umbral de la pobreza. De manera que el sistema de pensiones refuerza las desigualdades de género existentes en el mercado laboral y la sociedad, continuando la situación de exclusión de las mujeres y contribuyendo a que el 15% de las mujeres españolas vivan en riesgo de pobreza o exclusión social.

Fuente: Ministerio de Empleo y Seguridad social