España va a recibir (una vez el Marco Financiero Plurianual probado) un número considerable de subvenciones y préstamos de parte de la Unión Europea.
Esos fondos comenzarán a estar disponibles en algún momento de 2021. Dos principios son cruciales :
Para aprovechar esta oportunidad hay que preparar con mucho tiempo proyectos concretos y reformas que permitan, en paralelo, un modelo económico más competitivo. Los proyectos de infraestructuras tardan de media entre dos y siete años en materializarse en la economía real (entre permisos, estudios de ingeniería, licitaciones...). Los proyectos de tamano más pequeño pueden tardar menos, pero han de agruparse para poder alcanzar una masa crítica que permita acceder y utilizar los fondos. Si se quiere que el dinero llegue pronto a la economía real, estos pasos deberán estar avanzados sobre proyectos previamente identificados. Hay que hacer un trabajo previo al menos un año antes de que los fondos estén disponibles.
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Una vez que las áreas están claramente definidas en las propuestas de la Comisión, hay que centrarse en actuaciones y proyectos concretos alrededor de:
Para maximizar la utilización de los fondos, es necesario conocerlos bien y poder coordinarlos para lograr el objetivo final de modernización de la economía:
Los fondos de cohesión (incluyendo Fondo de transición Justa) llegan a las regiones y se programan para siete años mediante la negociación de programas operativos. Los de cohesión estarían equipados con 5.000 millones de euros adicionales en 2020 y 50.000 millones en 2021, con una clave de asignación diferente que aborde las necesidades inmediatas, en función de los cambios en el PIB y el desempleo.
Los instrumentos financieros del Banco Europeo de Inversiones son accesibles a partir de un cierto umbral para cualquier inversor público o privado (que puede solicitar asistencia técnica para armar su proyecto), sin ninguna pre-localización por países. Los países que presenten más y mejores proyectos serán los más beneficiados por este instrumento. Se abriría una nueva ventana en InvestEU y el Mecanismo de Inversión Estratégica ayudaría a garantizar la autonomía estratégica en el mercado interno, invirtiendo en cadenas de valor clave. El instrumento de soporte de solvencia se lo proporcionará a empresas viables. Todas éstas son herramientas financieras basadas en la garantía respaldada por el Presupuesto de la UE. La Unión no tomaría posiciones en las empresas sino ofreciendo garantías para la inversión.
Finalmente, tenemos el nuevo instrumento Recovery Resilience Facility, donde los estados miembros tienen que presentar planes de reformas e inversiones que han de ser validados por la Comisión Europea y refrendados en el Consejo. Este plan deberá estar en línea con las recomendaciones del Semestre Europeo. Este programa recibiría 310.000 millones de euros en subvenciones y 250.000 millones de euros de capacidad de préstamo disponibles para los 27 estados miembros.
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Proyectos e inversiones de calidad
España cuenta con buenas infraestructuras tradicionales; muchas de ellas realizadas en el pasado con el apoyo de los fondos de la Unión. En la transformación del modelo económico español, tal vez sea necesario poner el foco también en otras inversiones, de tamaño más micro, para la modernización económica e industrial. Estos proyectos pueden llegar a ser más intensivos en empleo (como es el caso de la eficiencia energética de edificios). A su vez, son más laboriosos de poner en marcha, al requerir modelos de financiación novedosos y una mayor necesidad de identificar y agrupar proyectos. Habrá que lograr un equilibrio entre creación de empleo, inversión doméstica e importaciones (ya que una parte de las soluciones tecnológicas serán importadas).
Dentro de estas inversiones podríamos considerar, por ejemplo:
Para llevar a cabo estos proyectos, España podría también beneficiarse de la asistencia técnica que la Dirección General de Reformas de la Comisión pone a disposición de los estados miembros.
Este tipo de inversiones requiere una mayor dosis de planificación y de colaboración entre los distintos actores que el de infraestructuras tradicionales. La colaboración entre el sector público y privado es fundamental desde el principio. El sector privado puede aportar co-financiación e información que puede resultar valiosa en la planificación.
La preparación del plan ha de concentrarse en la calidad de los proyectos y en un calendario realista. No se trata sólo de preparar los proyectos, sino de garantizar su calidad y ejecución en función de un calendario preciso. Todo con un buen proceso de monitorización en virtud de objetivos y buenas prácticas.
El plan debe ser visto como una oportunidad de ganar competitividad y reorientar el futuro de la propia economía.
Una propuesta concreta de reforma estructural
Polonia tiene uno de los mayores índices de absorción y de ejecución de los fondos europeos.
Una de las razones puede ser la buena preparación y la coordinación efectiva a nivel técnico de todos los actores clave para la creación de pipelines de proyectos que maximicen la utilización y el impacto de los fondos.
Un comité técnico formado de expertos en el que están representados tanto los ministerios relevantes como los responsables de inversión de las regiones, la banca pública de desarrollo (el equivalente al Instituto de Crédito Oficial) y representantes del sector privado, se encarga de dar forma a esos pipelines de proyectos con una visión horizontal con respecto a los fondos:
Este Comité, además, mantiene una interlocución regular tanto con representantes del Banco Europeo de Inversiones como con representantes de la Comisión Europea (negociación de programas operativos), o con inversores privados que pueden co-financiar parte de los proyectos.
Es importante la coordinación entre distintos niveles de la Administración (incluyendo los niveles regional y local) para asegurar la coherencia del plan y optimizar sus posibilidades de éxito.
Un ejemplo práctico: la renovación de edificios
La renovación de edificios para la eficiencia energética es un tipo de inversión que cubre varios objetivos:
Además, es un punto recogido en la Recomendación 3 propuesta por la Comisión el 20 de mayo de 2020 en el marco del Semestre Europeo.
Distintos instrumentos del Marco Financiero Plurianual pueden contribuir a este objetivo:
Lo que parece importante en estas circunstancias es desarrollar un plan (para edificios de titularidad pública, viviendas, etc ) para alcanzar una masa crítica de inversiones (la renovación de un apartamento es una modesta, la renovación de un parque de miles de viviendas es el target que debiéramos considerar) y combinar de la mejor manera los instrumentos existentes para que el dinero llegue pronto a la economía en cada ciudad, región, etc
En este sentido, una vez que se decidan las posibilidades técnicas y financieras, se puede ver:
Conclusión
Los fondos propuestos para la recuperación por la Comisión Europea ponen la responsabilidad en los estados miembros, que tendrán que pensar y presentar planes de inversiones y reformas que serán examinados por las instituciones europeas y los demás estados miembros.
El Ministerio de Economía tiene un papel muy importante en este sentido. En concreto, el modelo puesto en marcha por la Administración polaca para coordinar a todos los actores ha asegurado unas tasas de absorción de fondos y ejecución de proyectos muy altas y puede servir de ejemplo. Este modelo integra a nivel técnico a todos los niveles administrativos, a la banca pública y al sector privado bajo la coordinación ministerial.
La oportunidad que pueden presentar estos fondos debe ser utilizada para reflexionar en un plan a medio-largo plazo para modernizar el modelo económico del país. Esta reflexión ha de movilizar a todos los actores clave del país.
(Pinche aquí si quiere ver la versión en inglés)
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